¿Olvidas qué decir cuando haces un video?

 

¡Tranquilo, a todos nos sucede! Ese molesto momento en el que te das cuenta que llevas ocho videos grabados y no has podido pasar de la primera parte. Deja de perder el tiempo y la paciencia; en este artículo te compartimos los secretos para que grabes de forma más efectiva.

 


¡Escribe ANTES lo que quieres comunicar!

 

 

Organizar tus ideas y escribir el diálogo de tu video, son pasos previos y fundamentales para grabar el contenido. Al crear un guion, estás generando una guía para facilitar la exposición de tus ideas principales. Así evitarás olvidos o intervenciones desordenadas que confundirán a tu audiencia. Lo más importante es mantener la coherencia en tu discusión. 

 

No olvides que cuando grabas una pieza audiovisual estás contando una historia, la cual debe cautivar al público y hacer que crea en ti. Si durante la grabación del contenido, te muestras leyendo una hoja de papel o moviendo tus ojos hacia otra dirección, demostrarás inseguridad y hará que la audiencia se desconecte. 

 

Ten presente que buscas que el público lleve a cabo una acción específica después de ver tu video: ya sea un like, seguirte o dejar un comentario. Por lo tanto, muéstrate seguro y vuélvete dueño de tus palabras. Recuerda que lo más importante es siempre mantener la coherencia de tu discurso.

 

Algunas preguntas claves que te ayudarán en la creación del guion: 

  • ¿Por qué y para qué estoy realizando este video?
  • ¿De qué tema hablo? 
  • ¿Qué acción quiero que realicen los espectadores?



No es memorizar, es comprender

 
 

 

Cuando forzamos a nuestro cerebro a memorizar cierto tipo de datos, solemos caer en bloqueos mentales. Se dan porque estamos obligando a nuestra mente a copiar un dato que no entendemos. En cambio, al comprender, buscamos la forma de relacionar la información con nuestro conocimiento, y así recibimos y acogemos los datos de manera más eficiente, logrando adoptar el tema para transmitirlo de una forma natural y confiada.

 

Si tu video tiene gran cantidad de datos o de cifras, pero son complicadas de comprender, puedes dividir esta información en diferentes fragmentos del guion. Así tendrás diversos momentos en los que podrás tomar pausas para hacer una revisión y seguir grabando sin que se evidencie el corte. 

 

Una vez hayas comprendido todo eso que deseas compartir, puedes darte el lujo de añadir un poco de tu improvisación. Pero ten cuidado: cuando lo hacemos sin un contexto, podemos olvidar información valiosa. Por eso es mejor comenzar con el conocimiento y luego añadirle un toque personal de improvisación, pues le dará fluidez, personalidad y diversión a tu video. 

 

 

VO CA LI ZA 

 

 

Uno de los elementos más importantes en la comunicación oral es la vocalización. El receptor interpreta el mensaje, por eso debemos procurar dar un mensaje nítido y claro. Lo logramos modulando correctamente, porque así garantizamos que nuestro video se entenderá bien.

 

Es indispensable llevar un buen ritmo para que nuestro público disfrute escucharnos. Tip: agrega pausas para darle tiempo al oyente de que asimile nuestro mensaje y se logre conectar con él. 

 

Una buena vocalización refleja confianza y ayuda a convencer a tu audiencia, pues consigues que te escuchen y mantengan la atención en ti. Al dominar la forma en la que te comunicas, logras que tu discurso sea comprensible, memorable e interesante para tu público. 

 

Habla despacio y con claridad; evita que tu discurso sea monótono para que no se vuelva aburrido. Saca algo de tiempo para estar en un lugar tranquilo y practicar en voz alta. Escúchate a ti mismo para que logres reconocer las pausas, el tono que usarás y las palabras que requieren una mayor modulación. 

 

 

En HILO siempre tenemos en cuenta estos tips antes de grabar nuestro contenido. Gracias a estos hemos descubierto cómo transmitirte un mensaje de la mejor forma. No olvides que el volumen de tu video es sumamente importante: hazte en un lugar favorable, sin ruidos externos e interferencias que lleguen a molestar. 

 

 

¡Atrévete a intentarlo!